Organizaciones en entornos complejos
Vivimos en un entorno complejo, y las organizaciones no iban a ser menos,…, para lo que muchas no están preparadas. Con este primer post queremos iniciar una serie de entradas en la que queremos trasladar nuestras impresiones de como las organizaciones deben trabajar y organizarse para adaptarse a entornos poco previsibles. Y como las “empresas digitales” parten con ventaja para afrontarlo.
Se ha escrito mucho de Kodak, Nokia o recientemente Yahoo, pero la realizad es que todas las organizaciones, independientemente del sector en el que desarrollen su actividad, están sufriendo al no estar preparadas para lo que está ocurriendo… en todos los ámbitos.
En gran medida, entre otros factores, esto se debe a que las empresas actuales, independientemente del tamaño, están diseñadas para entornos complicados, heredando una estructura y modelo operativo de la era industrial, y no para entornos complejos como el que estamos viviendo.
Para profundizar en el tema, es necesario comenzar por la imagen que toda organización presenta al exterior y a las nuevas incorporaciones, movido en gran medida por la “necesidad” de los managers de mostrar su estatus al público.
Organigrama de una organización, apenas ha evolucionado en 2 siglos.
Según la definición que nos proporciona la Wikipedia, un organigrama “es la representación gráfica de la estructura de una empresa o cualquier otra organización, incluyen las estructuras departamentales y, en algunos casos, las personas que las dirigen, hacen un esquema sobre las relaciones jerárquicas y competenciales de vigor.
El organigrama es un modelo abstracto y sistemático que permite obtener una idea uniforme y sintética de la estructura formal de una organización:
Desempeña un papel informativo.
Presenta todos los elementos de autoridad, los niveles de jerarquía y la relación entre ellos.
En el organigrama no se tiene que encontrar toda la información para conocer cómo es la estructura total de la empresa”.
La representación “típica” es vertical, mostrando las jerarquías según una pirámide, de arriba abajo (aunque hay diferentes formas de representación: Horizontal, Circular, Escalar,…).
Esta representación surgió por una necesidad, y se remonta a mediados de 1800, cuando la empresa de ferrocarriles New York-Erie decidió plasmar gráficamente la organización ante el gran crecimiento que estaba experimentando, y si a eso le sumamos la dificultad de la comunicación entre los responsables, se hacía más que necesario el plasmarlo para ayudar en la toma de decisiones. El organigrama resultante fue creado por Daniel McCallum, el que por aquel entonces era el manager general de la organización, con la finalidad de mejorar la comunicación de información crítica, y la delegación eficiente de tareas.
Es clave comenzar por este punto, porque podemos apreciar que en dos siglos, apenas ha variado la principal herramienta de representar las organizaciones, lo que nos da una idea del poco desarrollo que han experimentado estas en algunos aspectos, lo que les dificulta el hacer frente a la situación actual de entornos complejos.
Dos principios clave de la era digital que imperan en las empresas exitosas son la transparencia y la confianza dentro de la organización y a todos los niveles, y basándonos en representaciones jerárquicas y de poder de hace dos siglos, limitamos la adaptabilidad y la transmisión rápida de información, necesarias para empezar a enfrentarnos a la realidad compleja que nos está sacudiendo.
Las organizaciones deben priorizar la transparencia y confianza, así como las interconexiones a todos los niveles de la organización.
La habilidad para responder rápidamente es crítica en los entornos complejos como en los que estamos viviendo, característica que impera en las empresas digitales punteras y start-ups actuales. Desde el punto de las grandes organizaciones y empresas con características más propias de la era industrial y entornos complicados, el 99,9% de las organizaciones, le lleva a plantearse cómo deben reinventarse para hacer frente a la nueva situación. Las organizaciones deben empezar a actuar como organismos vivos con rápidas interconexiones y flujo de información transparente en entornos con impredecibles desafíos.
En próximos post iremos construyendo en torno a cómo las organizaciones deben afrontar el entorno complejo en el que vivimos, y cómo las empresas digitales están sacando ventaja de dicha situación.
Este Post, como todos los del Blog de Clickec.com, está en construcción…… Permanente.
