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Empresas en la era Digital: El producto, el “qué” (IV).

El siguiente elemento que caracteriza a las empresas digitales, son sus productos y/o servicios que son ofrecidos al mercado. Los productos, y/o servicios, es aquello que una organización ofrece a sus clientes y/o usuarios.

El acto de desarrollar productos ha sufrido una gran transformación, donde antes eran unos pocos los que los desarrollaban, ha pasado hoy en día a una gran democratización, donde cualquiera puede llegar a “crear” aquello que desee. Como ejemplo en fuerte incremento que están experimentando las cervecerías artesanales de producción casera, el desarrollo de impresoras 3D,..

Las empresas tradicionales se caracterizan por desarrollos rígidos, que apenas han sufrido variación en los últimos años, con un largo proceso de investigación, conceptualización,… y con una fuerte inversión detrás. En cambio, las empresas digitales se caracterizan por ciclos más cortos, con unos desarrollos más lean: construir, medir y aprender constantemente.

Un bien ejemplo de esto son algunas plataformas como AirBnb, Uber, Amazon,…, donde su foco está en la satisfacción del cliente, y ofrecerle la mejor experiencia posible, testeando constantemente pequeñas mejoras, que pasan inadvertidas por el cliente y/o usuario, pero que les proporcionan un gran conocimiento de este.

Charger prototype finding its way to Model S


Las empresas digitales, se caracterizan por “cometer” errores pequeños, con ciclos de tiempo cortos, y sólo cuando se produce en encaje producto y mercado se escala, pero siempre bajo la premisa de adaptabilidad constante del producto a las necesidades del mercado, nunca es un producto cerrado.

Las empresas tradicionales trabajan todavía en base a entornos complicados, mientras que las organizaciones digitales, son flexibles y trabajan en entornos de complejos, de mucha incertidumbre. Un ejemplo de esto es Tesla Motors, que en gran medida es un ordenador con ruedas más que un coche, y que constantemente está recibiendo actualizaciones y mejoras de forma remota, basta con actualizar el software. Un ejemplo de esto es cuando decidieron subir unos milímetros la altura del coche, bastó con incluirlo en la actualización, y en apenas unas horas todos los coches de la marca estaban a la altura indicada. Si un fabricante tradicional detecta un error una vez el coche ya está en el mercado, muchas veces años después, debe de llamar a todos estos, con un importante gasto monetario, de horas, y sobre todo de alto coste en la imagen y experiencia del cliente con la marca.

Las empresas digitales se diferencian en gran medida de las tradicionales en su constante innovación, nunca dando un producto por terminado, sino en constante desarrollo, y siempre abierto a mejoras, las cuales se producen de forma inmediata, sin enamorarse de producto anterior.

En próximos post iremos construyendo en torno a cómo las organizaciones deben afrontar el entorno complejo en el que vivimos, y cómo las empresas digitales están sacando ventaja de dicha situación.

Este Post, como todos los del Blog de Clickec.com, está en construcción…… Permanente.

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